La U triunfó 2 veces

Hay muchas críticas. Incluso, comentaristas deportivos que dicen estar en contra de las barras bravas las apoyaron este fin de semana en su disputa porque así favorecían su apetito de expulsar a Markarian de la DT de la "U".

Pero el técnico uruguayo, como Bielsa, le está haciendo MUY BIEN no sola a la U sino al fútbol chileno.
Primero, tal como el argetino, confió en los jóvenes. Basta de no creer en los jóvenes sin conocerlos. Como Bielsa calló a todos los que pedían la convocatoria de la selección adulta a los "jugadores experimentados" que fueron castigados por su indisciplina en la Copa América, porque ganar a cualquier precio revienta los rating, Markarian silenció a los hoy le pedían que la "U" jugara con un equipo con "nombres" para llenar estadio y reventar ratings de prensa, radio y TV.
La confianza de Markarian en los jóvenes, no sólo les dio un respaldo anímico que les potenció en su rendimiento, sino que demostró que la U tiene jugadores jóvenes buenos y, a diferencia de Montillo, con ganas de jugar.
El otro triunfo es UN TRIUNFAZO. Por primera vez en la historia de "Los de Abajo" (bandidos con chapa de hinchas) alguien los enfrentó y los puso en su lugar. No fueron los dirigentes antiguos que con la excusa marketera de las responsabilidad social montaron una " escuelita" permitiendo que en la casona azul existiera una verdadera "universidad del delito" con especialidad en saqueos de tiendas de provincias o carreteras, violencia y tráfico de drogas. Tampoco los actuales dueños de la concesionaria del club "azul-azul", que con la máxima de ganar dinero a toda costa y no enemistarse con "los clientes", les perdonaron los banderazos y las interrupciones a entrenamientos y presionesindebidas a Salah y sus jugadores.
Sin embrago, con Markarian trabajan hombres de verdad, que de verdad y no en el papel lo han ganado todo y saben lo que quieren. El segundo entrenador de la "U", Aguirregaray, con los huevos que siempre debió tener la U, huevos del porte de los de aquel mítico ballet azul liderado por el Gran Leonel y Rubén Marcos, encaró al jefe de barra Anarkía que festinaba e injuriaba a todos los jugadores y técnicos de la "U" en pleno entrenamiento. El "bandido" no solo enmudeció sino quedó pálido y hoy, afónico, de tanto gritar el triunfo de la U como si fuera fruto de él. Ahora, todo el medio (sin miedo) debe apoyar a Aguirregaray y blindarlo frente la delincuencia, siempre ávida de cobrar venganza cuando se hace pase tal vergûenza al "capo". Todo el medio y, en especial, azul azul debe aprovechar la puerta que abrió el valiente charrúa para sacarlos a todos, incluso a los asesores de seguridad y de imagen que ante el temor que les han tenido nos venden la mula que no se les debe tocar porque son necesarios.

Cuando un grande anda bien, y hace cosas como la mencionadas, también crece el fútbol chileno.