Domenighini desapareció sin dar aviso de su paradero e hizo imposible que Unión pusiera término a su contrato y ocupara su cupo de extranjero. El jugador pudo haber negociado dando la cara, se habría enterado que económicamente recibiria lo que le correspondia hasta el termino de su contrato y que deportivamente podia ir a otro equipo para jugar sin dañarse en lo económico. Al final, tendra que volver al club, dar la cara y excusas, sentarse en la banca (si acaso lo incorporan) ..Cuando se exigió el finiquito firmado como condicion para autorizar inscribir un nuevo jugador en reemplazo de uno vigente, sólo era para asegurar los derechos económicos del deportista que no seguiria en el club. Hoy, los futbolistas no solo buscan seguridad economica sino deportiva. Eso es abusivo. El jugador al fichar lo hace para entrenar y jugar. Pero la titularidad nadie la tiene asegurada por contrato sino por rendimiento.
Como ayer se castigo publicamente a los clubes abusivos, hoy se deben reprochar publicamente este abuso de un jugador. El SIFUP tiene la palabra.
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